domingo, 22 de noviembre de 2009

Oia y la puesta de sol (Santorini - Grecia)

Ximena dixit:

Llegamos sobre las 7,30 a Oia, paseamos un rato entre una multitud que ha venido ya a colocarse donde pueda para ver la puesta de sol, y hacia las 8 buscamos el bar donde estamos invitados a un cóctel, porque ya lo llevamos incluido dentro de la excursión. Se llama Sun Spirit y es un bar con dos terrazas sobre el mar. Didier habla con el encargado y nos llevan a una mesa con buena vista en la segunda terraza, enfrente de la isla pequeña, nos dicen que la primera copa está pagada. Didier queda con nosotros entre 8,30 y 8, 45 en la plaza donde están los aparcamientos. Todo el mundo prepara las cámaras de fotos. La puesta empieza a las 8,30, es bonita, aunque no es la mejor, nosotros, sin ir más lejos desde casa en Medina tenemos el privilegio de ver algunas inmejorables, sobre todo en otoño.

Cuando intentamos salir hacia el aparcamiento, nos damos cuenta de que todo el mundo quiere hacer lo mismo y ese todo el mundo son miles de personas, pero además es que hay otra multitud que está llegando, si a esto le añadimos que las calles son muy estrechas, pues es como Sevilla en una bulla de Semana Santa.

Conseguimos llegar y ya se acaba la excursión, en el camino de vuelta, Didier nos dice que hay una taberna al lado del hotel, en la playa, que está muy bien, con comida griega, entonces el coche nos deja allí y nos despedimos. Didier y Basili se ponen muy contentos con la propina, Didier nos dice que la coge porque lo necesita, que si no, no lo haría, porque ha sido un placer y que muchas gracias.

Nosotros nos quedamos a cenar en una mesa al lado del mar y Didier va a recoger su moto que la ha dejado en el hotel. Durante la excursión hemos intercambiado información sobre arte bizantino y ha sido agradable. Se parece mucho a nuestro amigo Vicente Vázquez, en la estatura y en los gestos más que en el resto del físico, pero el parecido es sobre todo por dentro, a veces cuando nos hablaba me parecía estar con Vicente. Curiosamente, Miguel pensó lo mismo y luego coincidimos al comentarlo en la cena.

Cenamos bien, una barbaridad, porque nos pusieron lo que llaman metze, que son aperitivos, pero era una bandeja enorme, luego unos gyros y Pablo una especie de hamburguesa pero sin pan, de postre sandía, helado y ese dulce que es como de cabello de ángel y tiene almendra, probé la cerveza griega, la Mithos, es ligera, demasiado floja.

Después al hotel, a preparar la maleta.







1 comentario:

mrayah dijo...

Seguro que vuestros guias tendran mas cosas que contar a sus futuros clientes despues de estar con vosotros.