29 de Febrero 2016 De Puerto Natales (Chile) a El Calafate (Argentina)
Esta
mañana estaba espectacular, la cordillera brillaba al sol en las partes nevadas
y le daba tonos rosados, el mar tranquilo y el cielo despejado, sin una nube.
A las 7
nos recogen en el hotel puntualmente para
llevarnos a la Estación del Ómnibus, como dicen aquí, para hacer una
larga travesía por carretera y caminos de ripio hasta El Calafate, pasando por
la frontera de Cerro Castillo. Cuando terminen el aeropuerto de Puerto Natales
no tendrá que hacerse el vuelo hasta Punta Arenas para ir a Puerto Natales ni
tampoco este trayecto en bus, si no que se llegará desde Puerto Montt a Puerto
Natales y desde Puerto Natales a El Calafate en avión.
Aparece
el autobús y sale a las 8. Es cómodo y tiene servicios. Vamos a tardar 5 horas
y la dirección es norte. El autobús va lleno, los únicos españoles somos
nosotros, hay argentinos, chilenos, unos asiáticos que creo que son coreanos y
algunos ingleses y alemanes.
Hasta
Cerro Castillo por pista de ripio y al llegar nos bajamos, primero frontera
chilena, cola de pasaportes y a continuación frontera argentina, lo mismo.
Pasamos los controles y ya por carretera, recta y sin arcenes. A la izquierda
una cordillera con picos nevados, una meseta con páramos, relieve tabular y
llanura interminable. El pasto está amarillo y hay vallas de ganado a ambos
lados, ovejas, caballos y vacas. Estamos en la provincia de Santa Cruz.
De vez
en cuando hay estancias, con corrales para ganado pintados de rojo y en la
carretera los Stop dicen Pare. En la tremenda inmensidad las ovejas o vacas se ven muy dispersas y muy
pequeñas. Llevamos tres horas de viaje y al fondo se asoman montañas nevadas
pero la llanura continua. Las montañas desaparecen y la llanura se
oscurece debido a una vegetación
arbustiva que lo cubre todo a derecha e izquierda. De nuevo las montañas al
fondo y un ñandú andando solo, paralelo a la carretera. Desaparecen los
arbustos oscuros y vuelven los tonos amarillos. Las montañas se quedan atrás
por el oeste y vuelve el páramo.
Pasadas
casi dos horas más aparece un enorme arco de montañas y un lago azul que es el
Lago Argentino y al poco rato por fin¡ El Calafate!
El
Calafate tiene unos 22.000 habitantes y hace diez años tenía 4.000, es una
ciudad muy extendida que sigue creciendo. Llegamos y al bajarnos del autobús
nos sorprende la temperatura que es muy buena, el cielo está despejado y el día
espléndido. Nos lleva al hotel un chofer muy gracioso que nos va indicando
donde hay restaurantes y tiendas, donde está la oficina de turismo y esas
cosas. Paramos en la oficina que organiza los Tour y nos explican el programa
para mañana y pasado. El Hotel es el Patagonia Park Unique que está a mitad del
cerro que hay sobre la ciudad, cerro que en invierno es una zona de esquí.
Bonita habitación, el hotel también aunque podría tener mejor mantenimiento en
el exterior, hay muchas flores pero el acceso al hotel es pésimo, claro que
supongo que la culpa de eso la tendrá el gobierno de la ciudad.
Uno de
los restaurantes recomendados es La Tablita, que está relativamente cerca.
Vamos por una avenida arbolada y antes de cruzar el puente sobre el río está el
restaurante. Es muy bonito, camareras muy amables, todo correcto. Pedimos carne como es natural y nos la traen sobre
ascuas dentro de un recipiente diseñado para tal fín, la carne es lomo de vaca
y cordero y está exquisita, acompañada de verduras a la brasa que hay que pedir aparte y de una
botella de vino de Mendoza que se llama Santa Julia, bueno también. De postre helado de calafate
con tarta de manzana y un café expreso . Fantástica comida por 75 euros. El
calafate es un fruto que se parece a los arándanos y a las moras pero distinto.
Este arbusto abunda aquí y por eso el nombre de la ciudad. No podemos con toda
la carne y pedimos que nos la fileteen y nos la llevamos para comer mañana
porque hay que hacer bocadillos para la excursión del glaciar Perito Moreno.
Nos
damos un paseo por la calle principal, muy agradable, muchas tiendas, precios
altos. Pasamos por el Centro de Interpretación del Parque Nacional y
preguntamos cómo es el arbusto del calafate, nos dicen que vayamos a la
costanera andando hacia el lago un rato. Es un paseo largo largo. En las calles
que bajan al lago hay muchos hoteles y casas con jardines y llegamos a una
laguna donde hay muchas aves y pasarelas y encontramos el arbusto. A la
izquierda está lo que llaman bahía redonda que es una parte del lago con poca
profundidad y que en invierno se hiela y la gente patina sobre el hielo y ese
es el deporte principal de El Calafate.
Foto otomada de http://www.laangosturadigital.com.ar/ecologia/villa-la-angostura-y-su-flora-el-calafate
Antes de
tomar un taxi para ir al hotel pasamos por un supermercado que se llama La
Anónima para comprar algo de fruta y pan para hacer los bocadillos para mañana.
Añadimos a eso galletas y yogures. La Anónima está bastante revuelto y no hay
mucha variedad pero no hemos visto alternativa mejor.
Mañana o
pasado volveremos por el centro.
Texto Ximena Prieto
Fotografías: Miguel Roa y Ximena Prieto
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